06 febrero 2008

El nido: cuando el amor no tiene edad

El nido. España, 1980

Director y guionista: Jaime de Armiñán

Intérpretes: Héctor Alterio, Ana Torrent

Temáticas de interés: pederastia, gerontofilia

Sinopsis:

En un pueblo de Castilla, Alejandro, un viudo maduro, conoce a Goyita, una niña de 13 años. La encuentra simpática y los dos inician una amistad que se va haciendo más íntima y más ambigua para la gente del pueblo, que empieza a propagar peligrosos rumores.

Comentario:

Al igual que en Mi querida señorita con la transexualidad, Jaime de Armiñán vuelve a acercarse en El nido con una enorme sensibilidad y respeto por los personajes a no uno sino dos temas muy escabrosos: la pederastia, la pulsión sexual, o en este caso más bien afectiva, hacia preadolescentes, y la menos conocida gerontofilia, la atracción hacia las personas de edad avanzada. Lo que podía haber resultado una trama sórdida se convierte en una agridulce historia romántica imposible entre un hombre demasiado mayor y una chica demasiado joven.


Hoy en día, dado el tabú tan brutal que supone el sexo entre mayores y menores de edad, probablemente esta manera de abordar el tema no habría sido aceptable, y tal vez esa sea una de las razones de que el film no sea valorado ni recordado como debería. Desde el punto de vista un tanto enfermizo que domina en la actualidad, podría acusarse a El nido de fantasía pedófila por tratar con simpatía a un personaje como Alejandro, al que no se retrata como a un viejo verde sino que es más bien la chica, Goya, la que va detrás de él, busca su amistad y empieza a introducir tintes ambiguos en su relación. Que las niñas los "provocan" con su comportamiento y que son mentalmente mucho más adultas de lo que cabría suponer por su edad suele ser una de las excusas de los pederastas a la hora de justificar sus actos. No obstante, nadie debería ver segundas intenciones en exponer una realidad de la vida, como es que las niñas preadolescentes coquetean a su manera con los adultos. Alejandro, por ser vulnerable, debido probablemente a su carencia afectiva desde la muerte con su mujer, se toma en serio estos flirteos y se deja llevar por los juegos de la niña con amargas consecuencias.

Goya, que se refugia en su amistad con Alejandro para escapar de una familia y un entorno en los que ve sus alas cortadas, es un personaje un tanto enigmático: su gerontofilia no parece venir de un deseo de protección por parte de alguien de más edad sino más bien lo contrario, le atrae que su amante platónico se muestre desvalido, tal vez porque así puede manipularlo a su antojo. El guión tiene una de sus bazas principales en mostrar a veces una gran complicidad con la niña y otras retratarla como a una femme fatale que lleva a la perdición a un pobre viejo.

Escenas destacadas:
  • Goya coge una navaja y lleva a cabo un juramento de sangre: se tatúa la inicial de Alejandro en la mano y a él le tatúa también la suya.

Anécdotas:



  • Finalista al Oscar de mejor película de habla no inglesa en 1980. El premio fue a parar a Moscú no cree en las lágrimas, una película soviética. Al parecer, el propio Armiñán ha reconocido que, decepcionado ante la derrota, le puso la zancadilla al encargado de recoger el premio en su camino hacia la estatuilla.


Sobre el director:

Jaime de Armiñán nace en una familia madrileña acomodada en 1927. Estudia derecho, pero pronto orienta sus pasos hacia el mundo del audiovisual, primero como comentarista, y más tarde trabajando como guionista en televisión. Su carrera como director de cine comienza con Carola de día, Carola de noche (1969), un vehículo de lucimiento para Marisol, y pasa a un terreno más personal con Mi querida señorita, cuyo éxito le permite hacer otras obras sobre amores heterodoxos, entre las que destaca El nido (1980), que le permitió ser de nuevo candidato al Oscar. Alterna el cine y la televisión hasta 1995, donde estrena la que hasta hace poco era su última película, El palomo cojo, aunque tiene pendiente de estreno su nueva obra, Fabian road

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4 comentarios:

Chusa dijo...

Tienes razón en cuanto al cambio de los tiempos. Me gustaría revisar la película porque la vi en el cine cuando se estrenó y mi recuerdo de ella es que se trata de una bella historia de un amor imposible. No la asocio con nada "sucio" y eso que la pederastia es uno de los temas en los que no admito paliativos.
Tal vez porque en la historia quedaba claro que era una relación no buscada por él y sin ninguna lascivia.
Pero es verdad que me gustaría comprobar si me he vuelto "polítcamente correcta"

Anónimo dijo...

Muy buena crítica y muy buen blog. ME encanta. Saludos

Dillinger is dead dijo...

Siempre es un placer leerte, Chusa. Y el blog pornógrafo gafapasta queda enlazado. Saludos a ambos.

Tamberlick dijo...

Recuerdo que cuando se estreno lo mas comentado era la maquina de ajedrez...